Voluntariado dirigido a la infancia

22 de febrero de 2023 - by Aurina Delgado de Torres Voluntariado social
En Hállate ofrecemos varios tipos de voluntariado continuo. Uno de ellos es el voluntariado dirigido a la infancia. Desde hace unos meses, varios jóvenes se han unido a distintas entidades para realizar voluntariado con este colectivo de niños en riesgo de exclusión social.
“Cuando decidí hacer el voluntariado, sabía que me sería más fácil si me dedicaba a ayudar a niños pequeños porque es algo que ya he tenido que hacer en anteriores ocasiones”.
Pelayo es uno de estos voluntarios que realizan actividades semanales dirigidas a este colectivo, el de los niños, específicamente en apoyo escolar.
Según los testimonios que hemos podido recoger de los voluntarios, ellos se sienten cómodos tratando el colectivo infancia y de esa cercanía también se benefician los niños, que pueden expresarse con libertad y sentir que el rato que comparten con los voluntarios también es un tiempo de compañía.
También es más fácil sentirse identificado con ellos, y es una experiencia de acercamiento a las comunidades más vulnerables de nuestro alrededor.
Los voluntarios comentan su primer día con nervios. Itziar nos explica que “el primer día estaba nerviosa, no sabía muy bien cómo iba a ser la clase, ni la dinámica entre la coordinadora y los alumnos. Pero, rápidamente, durante las primeras sesiones, los niños empezaron a ser muy cariñosos conmigo y cada vez tienen más confianza”. Lander, que también realiza apoyo escolar bajo la modalidad online, igualmente ha sentido que “las clases van muy bien y el alumno está progresando constantemente”. Por su parte, también Bruno ha sentido que los nervios van desapareciendo: “después de varias semanas me he dado cuenta de que ha sido una experiencia diferente y divertida que me gustaría repetir”.
Pelayo está muy agradecido, ya que “afortunadamente, desde el primer día que hice el voluntariado,
nunca he tenido ni que pensar en vencer mi pereza para volver, porque lo disfruto mucho y espero que así siga siendo. La verdad es que los niños son encantadores y es una maravilla tratar con ellos. Me alegra la tarde entrar a la Fundación y que los niños a los que ayudo digan mi nombre con una ilusión que se ve en sus caras”.
“Para mí, hacer un voluntariado, es gratificante”.
Para Itziar, es gratificante “sobre todo ver como ayudas a los demás, y como un pequeño esfuerzo
de tu parte puede llegar a ser tan importante en el desarrollo de los niños”.
Tanto para Itziar como para alguno de los jóvenes esta ha sido una experiencia nueva. Bruno reflexiona que el voluntariado le ha ayudado principalmente a “darme cuenta de la suerte que tengo en la vida, ya que hay mucha gente que no tiene las mismas oportunidades que yo”.
“Yo ya noto que el voluntariado ya ha dejado huella en mi forma de ser”.
Pelayo contesta de la siguiente manera cuando le preguntamos qué es lo que personalmente le aporta el
voluntariado: “Primeramente, me ha abierto la mente y la forma de ver las cosas. Ahora soy todavía más consciente de los privilegios que puedo vivir en el día a día, que no todos pueden gozar. Sé que a partir de ahora voy a ser más agradecido con todas las oportunidades que se me presenten. Además, el voluntariado me aporta el sentimiento de la comunidad que creamos los unos con los otros. Esto se debe a que poco a poco, vas estableciendo un vínculo con muchos de los niños, y acaban formando una parte de tu día a día. Para mí, el voluntariado no es un sitio al cual voy dos horas a la semana, y al salir me olvido de ellos hasta que me toque volver la próxima semana. Para mi ahora es algo que cruza mi mente todos los días; me acuerdo de los niños, me paro a pensar si sus exámenes les han ido bien y me alegro de verlos de nuevo al volver a la semana siguiente”.