Las competencias blandas o “soft skills” son aquellas destrezas asociadas a la inteligencia emocional y a la capacidad que tiene el ser humano para interactuar efectivamente a nivel personal y profesional.

La adolescencia es una etapa importante de cambio en los jóvenes.  El voluntariado se considera una formación no formal de la persona donde se trabaja y desarrolla la empatía, la asertividad, la comunicación interpersonal, la planificación y organización, el compromiso, el liderazgo de servicio, la flexibilidad y adaptabilidad, la resolución de problemas y la creatividad. Es importante que en esta época de cambio en los jóvenes les demos la oportunidad de formarse en estas habilidades y se conviertan por tanto en personas empáticas, flexibles, creativas, comprometidas y no tan egoístas e individuales (características de la adolescencia).

“ El voluntariado para menores de edad desarrolla la empatía, la asertividad, la comunicación interpersonal, el compromiso,  la adaptabilidad y la resolución de problemas.”

El voluntariado es una manera de acercar a los jóvenes a diferentes realidades de su comunidad y también permite a los menores de edad poner en práctica sus aptitudes y habilidades fuera del ámbito académico, pudiendo crear un impacto positivo entre los diferentes colectivos y dejando huella en nuestra sociedad. En esta época para algunos jóvenes tan frustrante y desmotivadora, el poder sentirse útil es de gran ayuda para ellos.

Ofrecemos voluntariados para menores de edad diverso en Madrid. En Hállate, buscamos que los intereses y las motivaciones del joven voluntario encajen con la entidad. De esta manera perseguimos que estas primeras experiencias de voluntariado sean positivas y enriquecedoras para estos jóvenes.  Asimismo, las entidades se benefician de jóvenes voluntarios llenos de energía, convirtiéndose además ellos en divulgadores de la labor que realizan dichas entidades.